Síndrome de Diógenes o Noé
Trastorno relativamente desconocido.
Los expertos lo consideran una variable del más popular síndrome de Diógenes, pero mientras que éste último consiste en acumular todo tipo de objetos de forma totalmente desproporcionada, el primero centra el objetivo de la manía del afectado sólo en recoger animales. No hay que confundir a la persona profundamente amante de los animales que tiende a acogerlos por compasión y responsabilidad y se muestra hasta exageradamente empática con el sufrimiento de los animales, con quien sufre una auténtica enfermedad mental.
¿En qué consiste el Síndrome de Noé?
El afectado por Noé acumula en su hogar un número desmesurado de animales de compañía sin preocuparse por darles la atención adecuada, así que las condiciones de animales y dueño son insalubres.
El afectado por síndrome de Noé no se preocupa por aspectos básicos como la alimentación, la higiene o la salud de sus "inquilinos". A los que no da siquiera una atención no ya adecuada, sino incluso mínima: ni alimentación, ni agua, ni atención veterinaria, ni condiciones higiénicas.
El enfermo no reconoce que sus animales están mal incluso ante niveles críticos y evidentes de desnutrición, deshidratación, infestación parasitaria, proliferación de enfermedades, ataques entre los animales, canibalismo y cría incontrolada, todo ello en un espacio lleno de cosas, orinas y heces.
El enfermo de Noé no reconocerá, como el de Diógenes, que comete un error y que su entorno está sumamente degradado, ni siquiera que los animales pueden estar sufriendo.
Una persona aquejada de este trastorno está lejos de ser un auténtico enamorado de sus mascotas.
Eso sí, cree estar salvando a esos animales y se opondrá ferozmente a que se los arrebaten, incluso una vez muertos.
Los animales acogidos por estas personas no se ciñen a un patrón. Pueden ser exóticos, silvestres o domésticos e incluso se pueden reunir distintas especies.
No obstante,lo más común es acumular mascotas domésticas por su accesibilidad y en muchos de los casos descritos hay cierta inclinación de los afectados hacia los Gatos, pues son animales independientes, abundantes y pequeños, así que es posible convivir con muchos.
El hecho de que fijen su objetivo en los animales, denota una necesidad de afecto no cubierta por parte de alguien con escasas habilidades sociales que ve mas factible relacionarse con mascotas que con otras personas.
Muchas personas que se han visto avocadas a recoger en casa animales en números grandes hasta 30 por ejemplo, pero tienen su casa limpia y los animales están cuidados ,claro que a costa de no cines, teatros, menos compra de ropas u otros temas y se sienten felices cuando pueden dar en adopción un gatito o perrito porque saben pasara a ser único y tendrá más caprichos y atenciones.
Hay que diferenciar a estas personas de las que tienen el síndrome. Si bien en nuestro país el sistema de salud no ofrece un tratamiento específico para este padecimiento, existen lugares donde a un costo muy accesible el paciente puede ser atendido. Tal es el caso de la Sociedad Psicoanalítica de México.
